La salida de Gran Bretaña (cuna del capitalismo y actual epicentro financiero) de la Unión Europea, conocida como BREXIT, y la victoria electoral del magnate Donald Trump en EEUU (principal potencia capitalista) son fenómenos que indican un cambio de época para el mercado global y que instalan un debate en torno a las posibilidades reales de recuperación del empleo en el mundo.
Ambos fenómenos estuvieron motorizados por amplias mayorías populares que, percibiendo una fuerte crisis del mercado laboral y una amenaza a la posibilidad de recuperar el viejo "sueño americano" o el "estado de bienestar", reaccionaron votando contra la globalización y el stablishment. Detrás de las promesas de reconstrucción industrial, de recuperación de las fábricas instaladas en países con menores costos laborales, como México, y de recuperación del empleo, se situaron las expectativas de amplios sectores de la clase obrera -sobre todo la franja de calificación media y alta- que tienen un fuerte deseo de "volver atrás"… pero… ¿es esto posible?
La problemática del empleo, asociada a la incidencia de las nuevas tecnologías, es uno de los síntomas que indican un cambio de época:
Replantearnos la cultura del trabajo: "No hay dudas de que la globalización económica ha tenido responsabilidad en la conformación de mercados de trabajo más competitivos y que la mayor competencia internacional en algunos sectores resultó en la destrucción de empleo y/o peores condiciones de trabajo en las actividades productivas más protegidos de muchas economías." "Las causas subyacentes deben buscarse en las nuevas tecnologías asociadas a la informática, la robótica, la inteligencia artificial y las llamadas ciencias de la vida, que vienen cumpliendo un papel similar al que la máquina a vapor o los sistemas organizativos asociados al taylorismo tuvieron en épocas pasadas." (Clarín 28/12/2016)
¿De dónde viene el problema del empleo?
- Expansión capitalista
Percepción de crisis en EE.UU: "La globalización (1991/2016) muestra cuatro grandes acontecimientos geopolíticos: caída de la Unión Soviética (1991), ingreso de China a la OMC (2001), colapso de Lehman Brothers (2008) y elecciones norteamericanas del 8 de noviembre (2016). Las crisis orgánicas buscan una ocasión. "La crisis no es un rayo en un día de verano, sino el mal tiempo persistente" (Hobbes). (Clarín 19/10/2016)
¿Qué relación tienen todos estos hitos históricos?
Con la caída del Muro de Berlín se produjo la unificación del sistema capitalista. La alianza entre M. Thatcher (primera ministra del Reino Unido desde 1979 a 1990) y R. Reagan (presidente de los Estados Unidos entre 1981 y 1989) indicó un cambio de rumbo en el mundo, ratificando el predominio universal del capitalismo.
Pero la caída de la Unión Soviética (URSS) no sólo significó la posibilidad de que el capital avance a lo largo y ancho del mundo, dándole al sistema capitalista forma global, sino que también significó la incorporación de millones "nuevos consumidores", que se sumaron al mercado mundial. Entre los nuevos consumidores de la ex Unión Soviética y los que se sumaron a partir de la incorporación de China a la Organización Mundial de Comercio (OMC) en el 2001, el mercado capitalista sumó 1.500 millones de nuevos consumidores. Impulso que provocó una enorme capacidad de expansión y promovió la innovación y el desarrollo de tecnología con una velocidad nunca antes vista.
Crece la antiglobalización: "La República Popular China respondía por 3% del comercio internacional en 2001 y trepó a 15% en 2015; y en términos de valor, su intercambio global se duplicó cada 4 años y sus exportaciones crecieron 30% anual entre 2001 y 2010." (Clarín 16/10/2016)
- Cadenas globales de valor
A partir de 1970 el proceso neoliberal, que se propagó a lo largo y ancho del mapa, tendió las bases jurídicas sobre las cuales se pudo desarrollar este fenómeno, eliminando trabas aduaneras prácticamente en todo el mundo. Ya sin barreras jurídicas que lo impidan, el capital transnacional buscando siempre maximizar su ganancia, sus retornos, y claro está, ganar en la carrera de la competencia, se expandió por todo el mapa. Las estructuras políticas acompañaron este proceso en prácticamente todo el mundo, incluso como conocemos bien, en muchos casos de la mano de gobiernos de facto. Esto generó durante un tiempo ganancias extraordinarias para los capitales más grandes, mientras que para los grupos económicos que no pudieron acompañar este proceso significó la desaparición y absorción por parte de los "grandes", acelerando así enormemente la concentración y centralización del capital a gran escala.
Este nuevo escenario propició las condiciones para que se imponga una nueva forma mundial de producir, la cual se cristalizó definitivamente durante la década pasada, y tomó la forma de "Cadenas Globales de Valor".
Este punto es clave para entender el momento histórico en que nos encontramos.
Enormes empresas con dominio y capital multinacional producen "partes" o "porciones" de su producción en distintos países, y ya no productos terminados. Es la muerte del "MADE IN". La inmensa mayoría de los productos que consumimos, ya sean de primera necesidad o de lujo, contienen partes hechas en distintos puntos productivos, ubicados en distintos países, pero siempre dentro del marco de la misma empresa o subsidiaria.
Esta expansión mundial de la producción y de los negocios también posibilitó que el mercado financiero adquiera un lugar primordial en esta etapa capitalista. La posibilidad de comprar y vender acciones de empresas transnacionales en bolsas de distintos países creó un escenario de especulación nunca antes visto, basta con mencionar que en el mercado financiero se mueven más de 10 veces el dinero que equivale al PBI mundial. Las llamadas burbujas financieras no son otra cosa que este fenómeno basado en la "proyección" de "futura ganancia" en la economía real.
Pero todo esto también afectó la distribución del empleo a nivel mundial.
- Nueva División Internacional del Trabajo
Clarín 10/02/13 - "La industria de EE.UU. crece, sin crear empleo": "La industria estadounidense crece pero no crea empleo, y en el mediano y largo plazo tiende a disminuirlo cada vez más. En 1979, la fuerza de trabajo industrial estaba constituida por 19,4 millones de operarios y ahora se ha reducido a 11,5 millones (-41%).”
El fenómeno de la desocupación es un proceso que se viene gestando hace unos cuantos años.
El objetivo del capital en expansión -maximizar ganancias y reducir costos tanto laborales como logísticos- se corresponde con el nivel de concentración del capital al que asistimos luego de una década de esta nueva forma global de producir. Se ha tornado irrelevante la fuerza de trabajo de baja y media calificación en los países avanzados y se ha eliminado, en los países emergentes, la opción de industrializarse a través de la sustitución de importaciones, provocando un proceso de "desindustrialización". Este proceso convirtió a los países asiáticos en el nuevo eje de acumulación e inversión global.
Como lo que orienta las inversiones de capital es la posibilidad de aumentar la tasa de ganancia, es decir, el proporcional de rentabilidad según la cantidad de dinero invertida, las empresas buscan relocalizar la producción en aquellos países donde el costo de producción sea cada vez menor. El ejemplo de Estados Unidos es ilustrativo: Muchas plantas industriales se han relocalizado, o directamente han cerrado sus "plantas madre" para reconvertirse en otros países (generalmente en países en desarrollo con alto grado de asimilación tecnológica como los países asiáticos y la India). Por ejemplo Intel, sigue siendo una "empresa estadounidense", pero sus plantas están localizadas en su mayoría fuera de EEUU, solo mantienen allí su sector de desarrollo e investigación, digamos, los trabajadores más calificados.
Este proceso fue dejando tendales de trabajadores del "primer mundo" fuera del sistema, muchos de ellos con gran calificación, pero que por una cuestión de alto nivel salarial ya no son competitivos dentro de la cadena, y son desechados por los capitales a la hora de decidir donde establecer las fábricas. En Detroit, por ejemplo, luego de que la ciudad se declarase en Default, muchas fábricas automotrices nunca más reabrieron, y las que lo hicieron bajaron 3 veces el salario, pasando de pagar U$S21 la hora a pagar en la actualidad U$S6.5. ¿Cómo no querer volver atrás?…
- ¿Estancamiento secular o ciclos de crisis capitalista?
Robert Skidelsky 20/05/2014 - El camino hacia la inversión plena - Revista Prensa - "Un fantasma acecha las tesorerías y bancos centrales de Occidente - es el fantasma del estancamiento secular." "El nuevo pesimismo no surge de los marxistas, quienes siempre han estado en la búsqueda de señales del próximo colapso del capitalismo, sino que proviene del corazón de la élite de los formuladores de políticas: la fuente es Larry Summers, Secretario del Tesoro del ex presidente de EE.UU. Bill Clinton y, en uno u otro momento, economista en jefe de muchas instituciones económicas. El razonamiento de Summers, en pocas palabras, es que si la rentabilidad esperada sobre la inversión está en caída, las tasas de interés tienen que caer en la misma medida. Sin embargo, las tasas de interés no pueden caer por debajo de cero. Esto podría dar lugar a que las expectativas de ganancias caigan por debajo del costo de los préstamos.”
Larry Summers incorporó la noción de "Estancamiento Secular" para explicar la "nueva normalidad" del mercado mundial, donde la creación de empleo se vuelve "anémica" y las tasas de crecimiento bajan estrepitosamente.
Una de los procesos que explican este fenómeno es el citado anteriormente. "El avance tecnológico conlleva un valor agregado mucho menor", y "el salto tecnológico es sustituto de mano de obra a gran escala" según palabras de Summers. Entonces, si tenemos en cuenta que la tecnología sustituye mano de obra y a su vez conlleva un valor agregado menor, tenemos aquí uno de los ejes para explicarnos por qué las tasas de crecimiento son bajas, y lo seguirán siendo, ya que por la competencia, el salto tecnológico no se detendrá.
La tasa de crecimiento económico -es decir, del valor que crea la sociedad- se mide a través del PBI (Producto Bruto Interno) de cada país. Al decrecer esta tasa de crecimiento, decrece el valor económico de las cosas, productos, que entran al mercado. Este proceso trae consigo otras problemáticas asociadas: "la tecnología sustituye mano de obra", o sea, crece el desempleo. Pero, entonces, ¿quién va a comprar las cosas que se fabrican? Cada vez son menos las personas que tienen la posibilidad de acceder al consumo.
Pensemos esto, "en este sistema todo lo que abunda baja su valor", lógica pura de la ley de oferta y demanda. Entonces tenemos miles de mercancías y cada vez menos potenciales "consumidores", esto genera un abarrotamiento de cosas en los mercados sin vender y por consiguiente una baja en su valor. Lo mismo ocurre con el empleo, más desocupación (más oferta de mano de obra disponible) menor salario y peores condiciones laborales.
Y esto también ocurre con el dinero. Summers habla de "tasas más bajas", y de "una era en la que existe una demanda de inversión insuficiente para absorber todos los ahorros financieros, incluso con tasas de interés tan bajas como para arriesgar las burbujas financieras". En otras palabras, abunda el capital acumulado y por ende baja su valor, baja la tasa de interés. ¿Y por qué ese dinero no lo invierten en la producción como ocurrió en otro momento de la historia? Justamente por lo que venimos diciendo, en la producción actual el uso de la tecnología y la poca mano de obra humana dan cada vez menor valor económico agregado, como lo indican las mediciones del PBI, por lo tanto ese dinero no rinde las ganancias esperadas si se invierte en la producción. Pero tampoco rinde ya buena tasa de interés, con lo cual empieza a estar ocioso, a abundar y desvalorizarse. ¿Dónde termina? En el mercado financiero, creando y arriesgando la economía a las burbujas financieras, como dice Summers, y como viene pasando exacerbadamente en los países del primer mundo desde 2007. Esta competencia entre los grandes capitales por quedarse con la porción más grande de la "torta" y del otro lado un desempleo creciente explican también lo que otro economista francés, Piketty llama "empeoramiento de la distribución de ingresos". Nosotros lo llamamos cada vez más miseria para más cantidad de seres humanos y más riqueza en cada vez menos manos.
Este estancamiento es estructural y sus bases ya se sienten en el primer mundo. Al parecer no se trata de un ciclo recesivo más sino que esta vez la tasa de ganancia no encuentra repunte en ningún rincón de la economía.
¿Cómo se expresa esta realidad en nuestro país?
Pagina12 16/08/2015 - Nuevos principios - Aldo Ferrer-"La industria argentina es una de las más extranjerizadas del mundo. Las filiales generan más del 80 por ciento del valor agregado de las mayores empresas. El déficit de sus operaciones externas, es parte principal del Déficit en el comercio internacional de Manufacturas de Origen Industrial (DMOI). A esto se agrega la transferencia de utilidades a las matrices y la distribución de rentas a través de los "precios sombra", en el comercio intrafirma.”
¿A qué se refiere Ferrer con una economía extranjerizada y qué significan los precios sombra y el comercio intrafirma? Vamos a poner, como ejemplo, la empresa Chevrolet Argentina:
Para ilustrar el análisis de Aldo Ferrer supongamos que Chevrolet Argentina le compra a Chevrolet Brasil autopartes para terminar el ensamblado final de un modelo de auto X.
Problema 1: Para fabricar ese modelo de auto el país debe realizar una compra internacional, lo que se conoce como comercio exterior, que generalmente se realiza en dólares.
Problema 2: Aquella parte que se compra al exterior tiene un mayor valor agregado que las partes que se producen a nivel nacional (las cuáles sólo son carrocerías y el ensamblado final). De esta manera, del valor comercial del auto, un gran porcentaje se utiliza para pagar la importación de las partes que contiene.
Problema 3: Como la compra se realiza entre filiales de la misma empresa (a esto se llama "comercio intrafirma") utilizan este mecanismo de comercio exterior para fugar capitales de forma encubierta en precios "inflados" o sobrefacturados. Digamos Chevrolet le paga a Chevrolet U$S1000 una pieza que en realidad vale U$S500, y de esa manera giran utilidades sin declararlas ante el fisco y evadiendo impuestos. Obvio que como es la misma empresa este mecanismo no afecta el valor final de producción. A esto se refiere Ferrer con el termino "precios sombra."
Este es un claro ejemplo de cómo funcionan las Cadenas Globales de Valor.
Extranjerización y Concentración Económica
En los últimos años el país vivió una de las mayores contradicciones en términos sociales y económicos: las empresas que más empleo generaban (automotrices) eran, al mismo tiempo, las empresas que más déficit comercial producían por el fenómeno que mencionamos anteriormente.
Estas son las consecuencias de una economía extranjerizada, producto de un proceso de concentración económica que no puede explicarse únicamente en términos locales, sino en su conexión con los procesos internacionales que mencionamos desde un inicio. En términos de Eduardo Halliburton: “(…) no obstante algunas importantes medidas tomadas durante los gobiernos Kirchneristas en relación a las corporaciones, es importante ver que la realidad indica que después de muchos años de políticas macroeconómicas expansivas, con alto crecimiento del PBI, recuperación de la actividad industrial, creación de empleo, inclusión social, disminución de la pobreza y la indigencia, no se pudieron adoptar, en relación a las corporaciones económicas, el conjunto de políticas necesarias para revertir en profundidad y de manera integral los procesos de concentración y extranjerización que se han incrementado significativamente en los últimos años. Si se toma la facturación sólo de las 200 empresas más grandes (nacionales y extranjeras, incluyendo todos los sectores de la actividad económica) en 1999 representaba el 16,4% del Producto Bruto Interno (PBI) mientras que en 2003 trepaba al 22,8% y en 2010 saltaba al 27,1%, lo que arroja un aumento del 75 por ciento en el grado de concentración." "Radiografía de las Corporaciones Económicas" - Instituto de Estudios Rodolfo Puiggros, 2015 -
Mientras los precios de los Commodities (principalmente la soja, el petróleo, y otros granos) se mantuvieron en alza, se pudo sostener el déficit, mantener la presencia del Estado para los sectores más desprotegidos, y desendeudar al país. Pero luego con la crisis financiera de 2008 (Lehman Brother) y más acá con la caída de los precios de Commodities, las políticas económicas se volvieron defensivas, anti cíclicas, con un gran esfuerzo por sostener puestos de trabajo, mercado interno y poder adquisitivo salarial.
"Lo que no pudimos ver”
Por lo bajo y a pesar de la victoria de muchas medidas populares reclamadas durante años, en el país seguía creciendo el dominio del capital extranjero rama por rama, y finalmente con el apoyo mediático y ante un campo popular fragmentado, la Alianza PRO llega al poder. Detrás de cada una de las críticas a los gobiernos kirchneristas y detrás de los apoyos a la "década ganada" se escondía un mismo problema: la imposibilidad de mirar la realidad no sólo en términos locales, sino en su conexión indisoluble con el sistema económico mundial. Así como la producción se piensa y se corresponde con una lógica global, las miradas, análisis y percepciones suelen pensarse de manera local y fragmentada. De esta manera, al no poder mirar y analizar la coyuntura global, no hay posibilidades de buscar reales salidas a cada una de las problemáticas que nos aquejan. Mientras tanto, aquellos que están entrenados para mirar el escenario global, los llamados intelectuales de derecha, pudieron desarrollar una estrategia electoral que permitió que por primera vez en la historia un partido de derecha llegara al poder por el voto popular. De esta manera, los representantes de empresas extranjeras y de capitales financieros se colocaron en el centro de la escena. Esta situación terminó de poner en consonancia la base económica nacional y su expresión política, de ahí que este gobierno sea llamado, y con acierto, una "CEOCRACIA".
En su primer año, el PRO ha implementado una cantidad de medidas que podríamos llamar de carácter neoliberal. Políticas de apertura de mercado, liberalización financiera, devaluación del 50%, quita de retenciones al sector agroexportador y minero, reducción del gasto público, ajuste fiscal, ajuste monetario, el pago de la deuda con los buitres en un arreglo al menos vergonzoso, y ante todo una enorme toma de deuda para financiar finalmente las utilidades empresarias (extranjeras) y la fuga de capitales. Todo para fomentar la "lluvia de inversiones" que sabemos será solo una garua pasajera. Los únicos capitales extranjeros que entraron al país son netamente especulativos y vinieron tras las altas tasas (únicas en el mundo) de corto plazo de las Lebac, que llegaron a pagar un 38% anual, y ya rondan el 26%, aunque siguen siendo tasas altísimas. Esta es una medida de una ortodoxia extrema en cuanto al ataque contra la inflación, cosa que solo ha generado la entrada de estos "capitales golondrina" pero no ha detenido con éxito el rumbo inflacionario a lo largo del año, y que ha generado que se haya reducido aproximadamente un 20% el poder adquisitivo del salario medio argentino en los primeros 8 meses del año. Todo un arsenal de medidas económicas para "volver al mundo" según palabras de los propios funcionarios PRO.
Pero ¿A qué mundo se pretende volver?
Como dijimos, el mundo desarrollado occidental va en sentido inverso, el BREXIT y Trump expresan un camino contrario al de la globalización neoliberal de décadas anteriores, contrario a los mercados libres y a los marcos regulatorios regionales. Pareciera volver el tratado bilateral, donde una de las partes siempre tiene más ventaja que la otra.
Con las políticas que se mencionaron, el gobierno de Macri ha colocado al país en una situación de fragilidad económica y financiera frente a un mundo multipolar donde la hegemonía ya no se dirime en el dominio del mercado sino en las alianzas geopolíticas, un tablero de ajedrez donde las corporaciones son tan grandes que aplastan fronteras nacionales, y donde el proceso de división internacional del trabajo termina de borrar los restos de dichas fronteras.
Clarin 18/08/2011 - Diez fondos de inversión controlan cuatro veces el PBI de América Latina -"Según datos de la consultora Investment&PensionsEurope (I&PE), los 400 mayores gestores administraban recursos equivalentes a u$s53,6 billones, un tercio más que la suma de los PBI de las mayores economías del mundo. Tan solo el mayor fondo de inversiones del mundo, BlackRock, controla activos por valor de u$s3,8 billones (3.800.000.000.000), poco menos que el tamaño de las cinco mayores economías de América Latina: Brasil, México, Argentina, Venezuela y Colombia.”
Ya está en marcha la 4° Revolución Industrial, de la mano de la impresión 3D, el BIG DATA, el Cloud Computing y la Inteligencia Artificial, es decir, todas las herramientas de producción totalmente automatizables, basadas en proceso de datos a enorme velocidad, con hiperconectividad, capaces de prescindir de muchas decisiones humanas durante el proceso.
El Mundo 02/12/2016 - La inteligencia artificial acabará con las clases medias, según Stephen Hawking - "En una columna para el periódico The Guardian, Hawking considera que "la automatización de las fábricas ya ha arrasado trabajos en la manufactura tradicional, y la proliferación de la inteligencia artificial posiblemente extienda esta destrucción de trabajo a las clases medias, donde solo sobrevivirán los roles creativos y de supervisión".
La Humanidad está ante un gran problema:
La explotación de trabajo humano es el único mecanismo con el que cuenta el capitalismo para producir nueva riqueza, para generar nuevo valor económico. Esto se debe justamente a que el trabajo humano es el único que produce más de lo que vale su reproducción (salario). De esta manera, si el trabajo humano es cada vez más escaso porque se reemplaza con tecnología, los empresarios no sólo se van quedando cada vez con menos valor para apropiarse, sino que, además, van quedando masas gigantes de personas sin trabajo, y por ende, sin posibilidad de consumir. Veamos más de cerca…
El caso de Apple es emblemático. Una empresa que representa la vanguardia tecnológica estadounidense y que, a su vez, tiene como bandera la meritocracia, el emprendedorismo y el éxito personal, tiene en efecto muy pocos empleados en EEUU. Su producto más vendido, el IPhone, se produce casi en su totalidad en China por una empresa llamada Foxconn que utiliza para ello 1 millón de robots, o sea que ni siquiera en origen genera empleos sino que apenas unos pocos puestos de muy alta calificación. Esta es la tendencia que marcan las cadenas globales.
El Mundo 02/12/2016 - La inteligencia artificial acabará con las clases medias, según Stephen Hawking - "Según un estudio de Citibank y la Universidad de Oxford, solo en EEUU corren peligro un 47% de los empleos debido a la automatización. En China, la cifra es mucho más preocupante: el 77%.”
Frente a este nuevo escenario global, una gran parte de los habitantes del planeta corren el riesgo de quedar fuera del sistema para siempre. Esta revolución industrial se lleva puesto millones de trabajos en el mundo. Desde 2001 se han perdido 7.6 millones de puestos de trabajo en EEUU, parte por la relocalización de la producción, y parte por la actualización tecnológica.
El problema de la desocupación ya no lo pueden ocultar ni los más arduos defensores del sistema, la propia canciller alemana, Angela Merkel, reconoce que "Europa no es una tierra de futuro para los jóvenes" (El País. 4/12/2014).
Al parecer, ninguno de los caminos, ni el de los libres mercados, ni el del proteccionismo, están en condiciones de hacer frente a la nueva era productiva. La capacidad instalada (cantidad de productos que se pueden producir) sobrepasa la capacidad de consumo en el mundo, los recursos del planeta son explotados vorazmente y el sistema laboral arroja cada vez más desempleados al mercado. Estamos frente a un cuello de botella.
¿Cuál es la salida?
Por ahora los pueblos se expresan por la negativa, es decir, buscan la solución mágica que les devuelva cierto bienestar que se desvanece, votan o luchan por detener el proceso que ya sienten en la piel. Otros pueblos migran para salir del horror o la miseria dejando atrás su cultura y sus afectos, en busca de una "oportunidad" más allá de una frontera, aunque la travesía sea a veces más riesgosa que la vida que llevan, y sin garantías de vivir mejor en el nuevo país.
La crisis económica, ambiental, social, cultural y política requiere una salida que no se resuelve con campañas electorales, sino de la mano de una transformación profunda.
La tecnología que se ha desarrollado pone en jaque a este sistema basado en el valor económico, pero a la vez ofrece la posibilidad real de disponer de recursos como nunca antes sucedió en la historia, y de planificar enormes niveles de producción en base a las necesidades sociales y no en pos de obtener una ganancia. Saber que hoy en el mundo se produce mucho más de lo que se puede consumir y que los avances tecnológicos hacen que podamos reducir nuestras jornadas de trabajo son sólo algunos de los datos que nos permiten pensar que la crisis del capitalismo, con su lógica interna de concentración y desigualdad, debe resolverse para que todos los seres humanos podamos vivir con la dignidad que nos merecemos y en armonía con el planeta.
No se trata de cambiar modelos, sino de crear nuevos paradigmas, se trata de resolver contradicciones agudas que están en aparente estabilidad pero siempre a punto de estallar.
El mundo tal como lo conocemos está en perpetuo cambio, es dinámico y cada vez los hechos suceden con más velocidad, producto del gran desarrollo tecnológico. Este desarrollo, como dijimos, es la piedra en el zapato de este sistema, y es a la vez la llave del nuevo mundo. Debemos ser conscientes que mientras no aparezca una alternativa concreta vamos camino a un conflicto mundial que puede devenir en una guerra de escalas nunca antes vistas por la humanidad, con la posibilidad de que desaparezcan grandes cantidades de personas y recursos naturales irrecuperables. Está en nuestras manos también evitar que esto suceda.
Mañana será igual que ayer y que hoy si seguimos haciendo lo mismo. Solo podemos modificar las cosas si nuestros actos cambian, que en definitiva es como se expresa nuestro pensamiento. Hay que poner en discusión el eje de nuestras relaciones sociales, basadas en la explotación y la competencia, para revertirlas. Construir una sociedad superadora y hacerse cargo de esa construcción es tarea de todos e implica transformar intereses particulares en intereses colectivos, trocar desinterés por compromiso y orientar cada una de nuestras acciones en esa dirección.
¿Acaso no podemos hacerlo? ¿Qué nos impide vivir en una sociedad sin hambre, sin inseguridad, sin asesinatos, sin violencia, sin drogas, sin trata de personas, sin guerras, sin especulaciones?
Bajo ninguna circunstancia este cambio será producto de una solución mágica sino que será fruto de la lucha, de nuestra capacidad de organizarnos y vencer el individualismo que nos ha impuesto el actual régimen de organización social y económico.
Enero 2017