Sobre la Ley de Abastecimiento
En el tratamiento de este tema para su mejor comprensión creemos conveniente remontarnos a los antecedentes de los aumentos de precios desde el año 2010.
I.- Los antecedentes.
En un documento-volante de fecha 7- 3- 2010, titulado “El tema de los aumentos de precios”, decíamos: “Hace un par de meses, comentando la medida gubernamental del otorgamiento de la asignación universal a los trabajadores desocupados y en negro, decíamos al finalizar: “Vimos de donde salen los fondos, veamos ahora hacia donde van. En primera instancia van a los bolsillos de millones de pobres que lo necesitan y que tienen derecho. Por eso es una medida justa y necesaria. Pero el ciclo de ese dinero no culmina allí. La Presidenta y varios ministros, entre ellos el de Trabajo, C. Tomada, han aclarado que los beneficiarios son personas y familias de muy bajos recursos, y por ende, esa plata ira al consumo rápidamente, con lo cual estimulará el ciclo económico, cosa necesaria en tiempos de crisis. Por lo tanto, esa plata ira a sostener el funcionamiento de todo el sistema (y, de última, a beneficiar a los mismos de siempre).
Esto decíamos hace cuatro meses. ¿Y qué ocurrió? A escasos tres meses de cobrar el salario por hijo, ni bien una parte de los trabajadores tuvieron un peso más en su bolsillo, ¡¡ Oh casualidad!! Se desata una serie de aumentos de precios en los alimentos.
¿Cuál puede ser la causa de esos aumentos? Veamos que dicen los empresarios, Clarín, 12- 2- 10, pág. 29: “En la primera reunión oficial del año de la Unión Industrial argentina (UIA) liderada por su titular, Héctor Méndez, se insistió en que el recalentamiento de precios -- en parte – obedece a la incertidumbre que generaron los últimos movimientos del Gobierno. Un informe interno de la UIA explica así a situación: muchos empresarios se cubren frente a la desconfianza con aumentos de precios”
Y en Clarín, 19- 2-10, pág.29: Los hombres de negocios quieren ese diálogo para enviar un mensaje directo: el Gobierno debe corregir rumbos para disolver las malas expectativas y encarar una acción antiinflacionaria. La UIA, en privado, entregó un “paper”(papel) no oficial en la Casa Rosada, en el cual se insiste en un plan antiinflacionario que trabaje sobre las expectativas y que evite una lacerante puja de ingresos. La UIA, en su borrador, insiste en que no hay motores reales de inflación, pero las expectativas negativas promueven las remarcaciones.”
(Ambos artículos son del “Panorama Empresarial” semanal de Clarín, escritos por Marcelo Bonelli).
1.- La propia UIA admite que “no hay motores de inflación”. Los empresarios remarcan los precios sin tener causas ni motivos reales.
2.- El problema dicen los empresarios, son las “expectativas”, pero, ¿qué es unaexpectativa? Algo que no sucedió que se piensa o se presume que va a suceder. ¿Se justifica remarcar los precios basado en presunciones o expectativas? , en realidad si no hay causas reales al remarcar con aumento los precios se está ganando exageradamente cobrando lo que no vale. Hablando en criollo, se está robando abiertamente.
3.- ¿De dónde pueden salir tales expectativas, quien es responsable de ellas? Esa pregunta se responde con otra pregunta: ¿Quién se beneficia con las supuestas expectativas? : los empresarios y grandes cadenas comerciales.
4.- la política y la conducta del gobierno no cambio en estos tres meses, buenas o malas son las mismas desde hace tiempo. No fue eso lo que cambió, sino el hecho de que los trabajadores y los pobres tienen un peso más en eso lo su bolsillo (por el cobro de la Asignación Universal por hijo) 5.- Luego la UIA llama “a evitar una lacerante puja de ingresos”; ¿qué es la puja de ingresos?: la disputa entre el salario del trabajador y la ganancia del capitalista. ¿Cómo calificar a este llamado de la UIA? ¿Cinismo, descaro? ¡¡Llaman a evitar esa puja y aumentan los precios sin causa real, agrandando su ganancia y robando una parte del salario del trabajador y los pobres!!
6.- Y encima intenta presionar al gobierno para que evite los pedidos de aumentos de sueldo “exagerados”
A esto se llama: tirar la piedra, esconder la mano y señalar otra mano como la que tiro la piedra.
Veamos que ocurre este año.
II.- Se desboca el problema.
En diciembre del 2013 comenzó una remarcación anárquica y caótica de precios que se extendió en enero, febrero, marzo del 2014, (Los precios variaban casi todos los días, las diferencias de precios de los mismos artículos entre un negocio y otro eran enormes). Luego de ardua pelea y esfuerzos del gobierno, se logro bajar los niveles de remarcación, pero no estabilizar. Y como veremos no faltan intentos especulativos y desestabilizantes para desatar otra escalada de los precios. La forma caótica e histérica de la remarcación de precios, durante meses, alarmó a los mismos empresarios que remarcaban, sintieron que el piso se movía bajo sus pies, porque desestabilizaba al mercado que dicen (y necesitan) defender. Veamos algunas noticias de Enero del 2014:
Clarín, 29-1-14, pág. 18: “Unas 29 asociaciones empresarias decidieron dar vida al que llamaron el Foro de Convergencia Empresaria. Su extensa declaración inaugural evitó hablar de la difícil coyuntura económica y política. “Ya es hora de que los actores productivos aprendan a verse como parte de un todo y a dejar de proceder como si cada parte fuera un todo. (…) Un país en el que sus fuerzas productivas, sociales y políticas operen en el marco de creciente fragmentación no puede progresar como Nación y está llamado a desgastarse en la confrontación perpetua entre sus partes”, señaló el documento que dio vida a este flamante Foro. El campo fue el anfitrión de ese encuentro que se realizo en la sociedad Rural de Palermo y estuvieron presentes las cuatro entidades de la Mesa de Enlace (Sociedad Rural, Coninagro, CRA y Federación Agraria).
Y en La Nación, misma fecha, pág. 8,comentando el mismo documento empresario, agrega: Luego de asumir “su propia responsabilidad, como actores sociales”, en los “fracasos “ del país, indican que “el empecinamiento en el error es siempre una expresión de ceguera.”
Dado que el lenguaje de este documento es confuso e impreciso, veamos :
1.- la advertencia va dirigida a “los actores productivos”, ¿quiénes son?, a primera vista esas palabras engloban a empresarios y trabajadores, sin embargo veamos el papel que cada uno juega en la producción: el empresario decide qué, cuanto y como se produce, donde se vende y a qué precio, si se esconde la mercadería para especular con su escases, etc; el trabajador solo tiene el papel de “ejecutar trabajo” y pelear por su salario , (cuya incidencia en los costos es mínima y siempre corre de atrás al aumento de precios), por lo tanto, es el empresariado quien decide en las condiciones del mercado;
2.- la declaración de las asociaciones empresarias “evitó hablar de la difícil coyuntura económica y política” ¿por qué evitó hablar de la coyuntura, y por qué la califica de difícil?, es evidente que alude a los más de dos meses de remarcación salvaje de precios lo que sume al mercado interno en el caos, lo fragmenta, desestabiliza, desorganiza y debilita,porque empuja a buscar en la producción del exterior no solo los productos terminados sino los propios insumos que los mismos empresarios necesitan para sus empresas, lo que desprotege al mercado interno..
3.- y ¿por qué “ya es hora…”? es que el “horno del mercado mundial no está para bollos” la competencia y el “proteccionismo” que traba o impide la entrada de productos extranjeros se agrava día a día, veamosClarín, 19- 1- 14, suplem. “iEco”, pág. 4: Bloomberg, (Especial para Clarín): “La crisis internacional desatada en 2008 ha dejado a los países más propensos a proteger el comercio y sus mercados financieros”. “A Davos, hogar espiritual de la globalización, le está costando defender su visión. Charles Collyns, ex subsecretario de finanzas internacionales del Tesoro estadounidense, dice sin vueltas que “la globalización se ha estancado”. “Estamos avanzando hacia un sistema que en los papeles es abierto pero que, por debajo está cada vez más distorsionado por subsidios y medidas de Compre nacional”, dijo Simon Evenett, profesor de comercio internacional de la universidad suiza de St. Gallen.”
8 meses después, La Nación, suplem. Económico, 21-9-14, pág.12, del The New York Times: “El crecimiento lento ya está socavando los argumentos en favor de los mercados abiertos. El comercio se ha desacelerado de modo significativo. Las medidas proteccionistas de pequeña escala se han multiplicado, al buscar los países proteger los productos locales.”
4.- Y ¿de qué “todo” son “parte” los “actores productivos” o sea los empresarios? todos ellos tienen el mismo mercado interno, como base de sus negocios y ventas. Si el mercado interno es el “todo” cada empresario que opera en él es una parte de ese todo. Por eso “deben verse como parte de un todo y dejar de proceder como si cada parte fuera un todo”. La declaración del empresariado llama a los empresarios a abandonar la visión y el proceder individualista, y comprender que su base de operaciones depende de cómo actúen ellos: de que esa base goce de buena salud o se desintegre y descomponga y sea fácil presa de otros intereses .
5.-“el empecinamiento en el error es siempre una expresión de ceguera”. (luego veremos que más que ceguera es miopía) De ¿qué error se trata? De seguir “procediendo como si cada parte fuera un todo”. Y ¿qué es lo que esa ceguera no permite ver? las condiciones de la economía mundial, Clarín, 1-2-14, pág. 35: “Lo que más sobresale es la evidencia de que pese a cierto optimismo superficial, sigue muy lejos de superarse la gran crisis económica y financiera del 2008.”
Y en Clarín, 2-2-14, suplem “iEco”, pág. 5, por Paul Krugman (Premio Nobel de Economía 2008): “¿Una nueva crisis en puerta? Se oye la tan temida palabra “contagio”, que una vez hizo que una crisis de Tailandia se expandiera por toda Asia, y que hace poco hizo que una crisis de Grecia alcanzara a toda Europa, y que ahora -- todo el mundo teme—podría hacer que la crisis de Turquía se esparciera por los emergentes del mundo. Se trata de una historia conocida. Pero eso es la que la hace tan inquietante: ¿Por qué sigue habiendo esas crisis? Y lo peor: los intervalos entre crisis parecen estar acortándose, y las consecuencias de cada crisis parecen peores que las de la anterior. Pero Turquía no es realmente el problema, ni lo son Sudáfrica, Brasil, India, o quien sea que este siendo golpeado ahora mismo. El real problema es que las economías más ricas del mundo –EE.UU. la Eurozona, y también actores más pequeños—no han logrado resolver sus debilidades subyacentes.”
III.- La crisis mundial manda.Condiciones y contradicción.
Esas son las condiciones de la economía mundial, que presionan y condicionan la economía de cada país, y la “obligan” a protegerse. Cabe preguntar: ¿cuál es la causa de esa “empecinada” ceguera del empresariado?, en la aguda, prolongada e incierta crisis mundial actual, si el empresariado no ubica la inmediata y exclusiva ganancia propia, dentro de una mirada del mediano y largo plazo, por un lado, y por otro lado, dentro del marco de conjunto del mercado y de la economía, esa ganancia inmediata y propia puede ser el preludio, la antesala de la quiebra, por lo tanto, la inmediata y exclusiva ganancia propia es la causa de la ceguera; porque hoy para el empresariado actuar empujado por la ganancia exclusivamente individual e inmediata es tener un bolsillo en la cabeza y no un cerebro. Pero, a la vez, pedirle a los empresarios que miren el conjunto de las condiciones del mercado y el mediano y largo plazo, ¿no es mucho pedirle? Cuando saben que si no logran la ganancia inmediata no llegan al mediano plazo en carrera, y la competencia hace que si no se asegura la ganancia propia otro empresario lo aventaja. Acá hay una contradicción, que en tiempos de crisis se pone al rojo vivo y se hace inmanejable: entre, por un lado, las condiciones económicas de conjunto (relativa estabilidad, armonía y equilibrio en el mercado) que se requieren para el funcionamiento “normal” de la economía y del sistema y que los negocios de los empresarios marchen; y, por otro lado, las necesidades perentorias de los empresarios individuales, pues su sobrevivencia en la competencia depende de poner toda, toda su atención, en su interés individual e inmediato. Por eso decimos que no es ceguera sino miopía porque lo único que alcanzan a ver es lo inmediato e individual: saquear el bolsillo popular, aunque eso estrangule sus negocios futuros y el futuro del país y el pueblo de lo cual depende la continuidad de sus negocios.
Veamos dos ejemplos concretos: uno de los anfitriones del encuentro empresario, y firmante del documento,¡¡¡ Solo tres días después de publicado!!! Clarín, 1- 2- 14, pág. 8 : “El Jefe de Gabinete, J. Capitanich, acusó a los “grandes productores” agrícolas de no liquidar “divisas” en el mercado local , por “avaricia y carácter especulativo”. El vicepresidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), P. Apaolaza, respondió categórico: “El productor va a comercializar cuando considere oportuno. Mientras tanto va a hacer lo que quiere porque todavía estamos en un país libre.”
La liquidación de esas divisas fruto de las exportaciones es esencial para comprar en el exterior los insumos necesarios para las industrias del país, o sea son esenciales para el funcionamiento del conjunto (“el todo”) de la economía del país. A tres días de firmar ese documento empresario, CRA hace exactamente lo contrario de lo que firmó y defiende lo que hace (esa “libertad para hacer lo que quiere” que esgrime no es otra que su propia e inmediata ganancia).
Más recientemente, Clarín, 23- 08- 14, pág. 8 : “La Organización Mundial de Comercio (OMC) intimó al gobierno por las trabas al comercio internacional. Tal como se esperaba, la OMC falló ayer contra la Argentina. Las conclusiones y recomendaciones se basan en las quejas presentadas por la Unión Europea, EE.UU, y Japón. Ayer, tanto Washington como las autoridades europeas celebraron el fallo. Por su parte, Miguel Ponce, de la Cámara de Importadores, señaló a Clarín que “el Gobierno debería adecuarse a las normas de la OMC porque el fallo viene a agravar la situación que ya viven los exportadores e importadores.”
Dentro del mismo artículo, en recuadro aparte hablan el representante europeo y el de EE.UU. : “Europa celebro la decisión. El comisionado de Comercio de la Unión Europea, Karel De Gucht, emitió ayer un comunicado en el que celebro la decisión de la OMC que indicó que “determinadas condiciones que impuso la Argentina a las empresas que pretenden importar productos violan la ley de la OMC”. “Este caso envía una señal importante de que el proteccionismo no es aceptado”. El representante de EE.UU. fue mucho más claro: “Dura respuesta de Washington. Esta es unagran victoria para los trabajadores industriales y agricultores”, dijo ayer Michael Froman, el representante de EE.UU. ante la OMC, luego del dictamen de la organización. No fue todo lo que dijo el embajador de uno de los países que impulsó la demanda contra la Argentina. “ Las medidas proteccionistas de la Argentina impactan sobre un amplio segmento de las exportaciones de EE.UU, y potencialmente afectan miles de millones de dólares en exportaciones norteamericanas cada año que sostienen empleos de de alta calidad para la clase media estadounidense”, consideró Froman. El funcionario también advirtió que “el gobierno de Barak Obama seguirá defendiendo los derechos de los EE.UU. en el marco de los tratados comerciales y asegurando que nuestros socios comerciales sigan las reglas que ayuden a los trabajadores de EE.UU. a competir en la economía global”
¿Está claro cuál es la amenaza?: el mercado interno de la Argentina tiene que consumir productos de la industria norteamericana y sostener los empleos de la clase media norteamericana. El gobierno les dice a los empresarios: “no maten la gallina de los huevos de oro”, o sea, la capacidad de consumo del mercado interno, el poder adquisitivo del pueblo, que es el único mercado más o menos seguro que tienen. Todos los países protegen su mercado interno y a la vez se desesperan por exportar su producción a los mercados extranjeros.
¿Ignoran la Cámara de Importadores y su Presidente que esto es una “espada de Damocles” para la industria nacional, que si EE.UU. y Europa logra romper las medidas protectoras de la industria nacional (descargando su crisis sobre nosotros), esa competencia extranjera hará cerrar centenares y miles fábricas y caer decenas y centenares de miles de puestos de trabajo, hundiendo la economía argentina y el poder adquisitivo del mercado interno?. Imposible que la Cámara ignore eso, pero tampoco ignora que “su” negocio, “su ganancia” inmediata será mayor.
Tanto Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), como la Cámara de Importadores (CIRA) firmaron el documento empresario, y hacen exactamente lo contrario.
Decíamos en un documento-volante de marzo del 2014: “si todo el problema radica en una equivocada política económica nacional, intencionada o no, y allí termina la cuestión, no es lo mismo a que, aun suponiendo esa equivocada política económica, tras de ella se encuentre una aguda crisis mundial a la que nadie le ve el fin, y cuyo centro y real problema está en la crisis de las economías más ricas del mundo. Y no es lo mismo porque no hay forma de que los países en desarrollo, como el nuestro, sus gobiernos y su clase empresaria puedan impedir que los países desarrollados y sus empresas trasnacionales y el capital especulativo mundial intenten permanentemente descargar su crisis en nuestros países, como está sucediendo. Si ante este intento de los más grandes capitales mundiales, y de la necesidad imperiosa de las economías más ricas del mundo de descargar su crisis en nuestros países , la actitud de los empresarios locales es especular y remarcar salvaje y caóticamente los precios, e apriete y saqueo al bolsillo popular, eso desprotege, desarma y desorganiza el mercado interno y le abre de par en par sus puertas a la intensión y necesidad de las potencias de descargar sus crisis acá.”
¿No es eso lo que está ocurriendo? Y no hizo falta esperar mucho tiempo para que el representante norteamericano en la OMC lo diga abiertamente. Y más aun, Clarín, 23- 08- 14, pág. 12: “Europa protestó por una misión comercial argentina a Rusia. Bruselas elevó el tono de su molestia por la misión comercial que el Gobierno envió esta semana a Rusia para aprovechar con exportaciones argentinas lo que Moscú dejará de comprar a los países de la Unión Europea (UE) y Washington. La protesta se enraíza en las represalias que EE.UU., la UE y otros países tomaron contra Rusia por el rol activo que le atribuyeron en la crisis de Ucrania. Una batería de medidas, como la prohibición de importaciones rusas a su territorio. Moscú replico con lo mismo pero en sentido inverso. Y el gobierno de Vladimir Putin dijo que iba a empezar a comprar más a la Argentina, Brasil, China, Nueva Zelanda y otros. El gobierno nacional mando a Moscú una delegación de funcionarios y empresarios que buscan colocar sus productos en el mercado ruso.”
Como vemos los países que impulsaron en la OMCla condena a la Argentina por proteccionismo (países que se presupone que están por el “libre Comercio”) ahora quieren protegerse ellos condenando a la Argentina por ir a comerciar con Rusia.
Ante estos peligros, y teniendo el enemigo adentro como son las multinacionales extranjeras, como por ejemplo las automotrices especulando en busca de una nueva devaluación del peso, por un lado, y la imposibilidad del empresariado y sus Cámaras y organizaciones unidas de enfrentar el problema, por otro lado, es el Gobierno quien debe asumir esa tarea: de allí la ley de Abastecimiento. Y, ¿por qué todo el empresariado a coro se pone en contra? Porque para defenderse de las amenazas que penden sobre la economía y el “mercado interno” argentino la Ley debe intentar poner coto al desenfreno empresario y el saqueo del bolsillo popular que es el que mantiene el consumo y por ende el funcionamiento de la economía, resolviendo la contradicción con la mira puesta en la solvencia del mercado, el poder adquisitivo popular, el mediano y largo plazo, los equilibrios de conjunto del mercado, limitando la visión exclusiva en la ganancia inmediata e individual; cosas que no pueden hacer los empresarios capitalistas individuales del país y tampoco sus Cámaras unidas, por mas declaraciones y reuniones que hagan.
Con esta Ley el gobierno lejos de querer eliminar la “libertad de mercado”, o imponer un “estatismo” anticapitalista, lo que pretende es darle condiciones mínimas de existencia al libre mercado y al sistema capitalista, ya que dejarlo librado a las propias tendencias “espontáneas” del “libre mercado”, que no expresan otra cosa que la ambición y codicia individual de los empresarios y banqueros, seria condenarlo al estallido; hacia donde iba en enero y febrero, cuando el gobierno se vio obligado a devaluar, e intervenir, acordando con los empresarios y cadenas comerciales “precios cuidados”; “acuerdos” que esos empresarios y cadenas comerciales no respetaron ni respetan y burlan de mil maneras.
Lo que intenta el gobierno con esta ley es asegurar las condiciones mínimas que posibiliten el funcionamiento más o menos “normal” del mercado capitalista.
En síntesis: desataron una remarcación salvaje de precios, el gobierno se vio obligado a devaluar la moneda, así y todo no paraba la escalada de precios, entonces acordó “precios cuidados”, para tratar de frenar la remarcación, no respetaron ese acuerdo que firmaron, ¿qué queda por hacer para el gobierno?, lo mínimo, ponerle límites al desborde de las empresas y los empresarios.
Reiteradamente una parte de la llamada “clase media” se opone a las medidas del gobierno; con esta ley, el gobierno intenta darle un grado de “normalidad” y “equilibrio” tolerable al mercado capitalista, eso intenta un mínimo de resguardo y defensa de los ingresos y el poder adquisitivo de los sectores populares, incluida esa llamada “clase media”, por ende, de oponerse a esta ley esa clase media se cavar su propia fosa.
Lo dicho no implica estar de acuerdo con todas las políticas de un gobierno muy heterogéneo, pero si reconocer que por más empeño que ponga, la situación, las condiciones, y la relación de fuerza nacional e internacional no le permitan al gobierno otra cosa que esas medidas. La presencia de la crisis internacional que se agrava día a día, condenan a estas medidas a ser transitorias, coyunturales y desbordadas, en el corto plazo. La misma presidenta parece presentirlo, cuando dice: Clarín, 25- 9- 14, pág. 10: “Antes de salir hacia el aeropuerto, la presidenta Cristina Kirchner reflexionó ante los periodistas: “Creo que el mundo está patas para arriba y no veo en los grandes líderes internacionales ideas para que nos saquen de esto.” Por lo cual todo esto tiene final abierto.
